Fruta

Es temprano, el Sol comienza a hacerse pesado; no es cuestión de taparlo con un dedo, si no de salir adelante y ayudar, ayudar.
El bozarrón de los caseros promocionando sus productos, a fruta viva, a voz inmadura. Es asi como uno se impresiona con lo primero que vé, sin conocerlo, sólo la apatía de las palabras que salgan, una bella hiperbole convencedora. Más al medio me encuentro con sorpresas, la misma fruta a bajo precio, pero más bonita que la que he comprado, ¡qué tonta soy!, eso me pasa por no recorrer y observar a mi alrededor. No importa, sé que tengo más cosas que me pueden servir. Camino a casa, el fruto de mi dolor de cabeza, cae de la bolsa uno del kilo...resulta que desde el principio fue una estafa; estaba hueca, negra, podrida de tanto tiempo. Más allá, por aquí por allá, ha de derramarse bolsa entera, romperse de tan frágil todo; el mismo show...siempre el dedo en la boca, escúpelo, escúpelo; ya fue bastante. ¿¡Qué hago ahora!?...mejor dejo todo ahí, no volveré a caer ni a creer sin conocer. Siempre adelante, siempre adelante.